Red de Itinerarios para Bicicletas

El plan RIB, Red de Itinerarios para Bicicletas, consiste en un inventario con más de 40 propuestas para posibles acciones de mejora de los carriles bici e itinerarios ciclistas que acondicionen y permitan en condiciones de seguridad, rapidez y accesibilidad el desplazamiento hasta o desde estaciones de transporte público. La conexión con la red de transporte es el objetivo primordial del plan.
Gracias a la bici se puede reducir aproximadamente en 2/3 el tiempo de trayecto a la estación o al intercambiador de transportes. De esta forma, la cobertura de la red se multiplica hasta por 8. Además de tiempo de trayecto, se pueden evitar trasbordos dentro de la red a un mismo o distinto modo (Metro o Cercanías) y también se pueden conseguir ahorros económicos por acceder a coronas tarifarias más céntricas.
El Plan RIB supone un completo diagnóstico para que las administraciones competentes se coordinen y planifiquen actuaciones que en ocasiones competen a varias instituciones: Ayuntamientos, Consejerías y operadoras de transporte.
Este plan se inició en 2016 y un año después se publicó un diagnóstico con el análisis técnico de 11 actuaciones prioritarias donde se incluía: la situación actual, la propuesta de actuación y la mejora de la intermodalidad que supondría ejecutar tal actuación. Un buen ejemplo de este tipo de actuaciones ha sido la conexión entre Fuencarral y el carril bici de la carretera M-607, donde hoy existe un carril bici segregado bidireccional que evita una peligrosa discontinuidad en un viario muy usado por ciclistas y cercano a una estación de Cercanías.
Las directrices de actuación para el plan RIB son:
- Demanda social y población beneficiada.
- Conexión con la red de transporte público.
- Inversión económica aproximada para su ejecución y Administraciones implicadas.
